Tübingen (Alemania), 1970

Vive y trabaja en Berlín. Su obra camina entre la Abstracción y el Informalismo. Reyle reactiva estilos, géneros y conceptos de la historia del arte del siglo XX como el Expresionismo Abstracto o el Minimalismo. Sus obras son notorias por sus colores y superficies, creaciones estéticamente simples, realizadas con técnicas mixtas utilizando plásticos, mapas, cromo, esmalte y brillo. Sus pinturas son, aunque con temas diversos, gestuales o geométricas, pero con un fascinante hilo común, la agresividad de la iluminación de neón y las paletas de colores psicodélicos.

Galeristas poderosos como Saatchi y Gagosian han apostado por este joven artista alemán que en tan solo dos años pasó de vender sus piezas a 14.000 dólares a rematar en subasta en 634.000 dólares, un crecimiento realmente espectacular.

Participa en las más importantes ferias de arte contemporáneo y ha cautivado a reconocidos coleccionistas como Francois Pinault, la compañía minera rusa MMC Norilsk Nickel o al Hedge Fund Auctor Capital Partners, dirigido por Amir Shariat.